Muchas personas piensan que optar por la comida vegetariana puede ser perjudicial para la salud por la ausencia de carnes. Muchas afirmaciones de este tipo son mitos. 

Una alimentación saludable se logra gracias a la buena combinación de nutrientes que el organismo necesita para su buen funcionamiento. Las proteínas, vitaminas y aminoácidos son algunos elementos esenciales para llevar una vida saludable. Es así que debemos llevar una dieta balanceada para evitar enfermedades alimentarias como por ejemplo la obesidad o la desnutrición. Elegir la comida vegetariana no quiere decir que vamos a dejar de consumir los nutrientes que necesitamos, por el contrario, vamos a tener muchas más alternativas para variar mucho nuestro menú. 

A continuación te presentamos los mitos y creencias más comunes en torno a la comida vegetariana:

1. Las mujeres embarazadas no deben optar por consumir comida vegetariana:

Se trata de un mito. En 1997 la Asociación Dietética Americana publicó un informe donde se demostraba que las personas que seguían dietas vegetarianas tienen tasas de mortalidad menores y contraen menos enfermedades crónicas y degenerativas. El estudio afirmaba que cualquier persona puede optar por la comida vegetariana, incluso las mujeres embarazadas. 

La dieta más completa es una ovo-lacto-vegetariana basada en frutas, legumbres, verduras, semillas, frutos secos, cereales, hortalizas, huevos y leche. Es posible que también necesiten algunos suplementos alimenticios pero lo mejor es acudir al nutricionista para adquirir una dieta más completa y eficaz.   

2. Seguir una dieta vegetariana es muy difícil porque es demasiado estricta.

Es un mito pues existen diferentes tipos de dietas vegetarianas que dan mayor flexibilidad para consumir algunos alimentos a los que estábamos acostumbrados antes. Por ejemplo, una dieta ovo-lacto-vegetariana permite la leche, el queso, el huevo y los derivados de cada uno. De igual manera una dieta pescetariana permite el consumo de carne de pescado. Por el contrario, los más radicales son los veganos que no consumen ningún producto derivado de los animales.

3. Todas las personas que optan por ser vegetarianos necesitar consumir suplementos vitamínicos y minerales. 


Este es un mito parcial. La mayoría de los vegetarianos no necesitan tomar estos suplementos pues los alimentos que conforman su dieta suplen los minerales y vitaminas que su cuerpo necesita. Eso sí, debes consumirlos en mayor cantidad porque sus niveles de concentración de nutrientes son menos elevados. Si te encuentras en transición hacia una dieta vegetariana lo mejor será que visites al nutricionista para que el proceso no sea tan chocante. El te dirá qué comer y en qué cantidades.

4. Las dietas vegetarianas no tienen el calcio que el organismo necesita.

La leche es una fuente de calcio muy importante en una dieta, sin embargo hay algunos alimentos que contribuyen a perder o retener este nutriente en nuestro organismo. Aunque no lo creas, es más importante consumir más cantidad de estos últimos que la fuente misma del calcio. Los pimientos, los plátanos y las naranjas son bajos en calcio pero reducen la pérdida de este. Además, las verduras de hojas verdes como la espinaca son muy ricas en calcio.

5. Las dietas vegetarianas contienen pocas proteínas por la ausencia de carne

Hay muchísimos alimentos de origen vegetal que contienen este gran nutriente. El pan, los cereales, los frijoles, el arroz, las pastas, las nueces e incluso el tofu tienen gran cantidad de proteínas que el cuerpo necesita. Debes elaborar una dieta balanceada para saber las cantidades de cada ración.

¿Alguna vez se te han pasado estas dudas por la cabeza? Ahora ya sabes que solo son mitos y que puedes llevar una vida muy saludable y nada restrictiva optando por la comida vegetariana.