Una buena forma de fortalecer la confianza es encontrar nuevas formas para tener intimidad. Hacerlo en la ducha inspira mucho erotismo y facilita el juego de roles.

La intimidad es una parte fundamental en una relación de pareja. Sin embargo, no se trata únicamente de meterse a la cama y seguir la rutina de siempre, hay que tratar de innovar y utilizar distintos escenarios para disfrutarlo más y al mismo tiempo fortalecer los cimientos de la relación. Una manera muy sencilla de romper la clásica costumbre es utilizar el cuarto de baño.

Aquí te damos algunas recomendaciones para que tu intento resulte todo un éxito:

Elemento sorpresa

Intimidad en la ducha

Sorprende a tu pareja después del trabajo. Que encuentre el baño ambientado y aromatizado, la luz tiene que ser tenue para facilitar la confianza, por ello es recomendable que utilices algunas velas.

Previos

Intimidad en la ducha

Recuerda que la cama no es como la ducha o la tina. Las posiciones pueden ser un poco más incómodas por lo que el sexo podría ser fugaz. Para no acabar tan presurosamente con ello, necesitas hacer juegos previos como por ejemplo que él te jabone a ti y visceversa.

Ingredientes fundamentales

Intimidad en la ducha

El agua acaba con toda lubricación natural, así que tendrás que usar un lubricante artificial que te ayude a facilitar el sexo. 

Si no tienes una tina, entonces adquiere un banquito para que te sea más fácil realizar algunas poses como el perrito. 

También podrías necesitas algunas agarraderas de esas que se pegan por succión a la pared para que te puedas sostener sobre algo. 

Si tienes ducha de teléfono has que tu pareja te exite con ella. Verás que la temperatura sube rápidamente.

Ahora bien aquí te damos otros consejos según el tipo de baño que tengas:

En la tina: Esta modalidad es ideal para las caricias. Como ambos se encuentran sentados y con el agua tapándoles, por lo menos hasta la cintura, es muy fácil llegar a los muslos y a los genitales. Con el agua y la posición corporal, los músculos se relajarán mucho facilitando la excitación. 

Intimidad en la ducha

En la ducha: Es una posición muy fuerte y erótica. Generalmente ambos amantes se encuentran pegados, la mujer dándole la espalda al hombre. El contacto de los cuerpos embadurnados con jabón o gel de ducha es una experiencia muy placentera.

Intimidad en la ducha

Ahora que ya sabes cuáles son los mejores detalles para disfrutar de un momento de intimidad magnífico en medio del agua ¿qué esperas para probarlo de inmediato?