La práctica de la aromaterapia consiste en la inhalación de los aceites de las plantas, denominados aceites esenciales, para mejorar el bienestar físico, mental y emocional. 

La aromaterapia es una disciplina terapéutica que aprovecha las propiedades de los aceites esenciales extraídos de las plantas aromáticas, para restablecer el equilibrio y armonía del cuerpo y de la mente para beneficio de nuestra salud y belleza. 

La aromaterapia ofrece diversos beneficios al tener propiedades analgésicas, antibióticas, antisépticas, astringentes, sedantes, expectorantes y diuréticas y puede tratar una amplia gama de síntomas y condiciones físicas como los malestares gastrointestinales, las condiciones de la piel, dolor menstrual y las irregularidades, las condiciones relacionadas con el estrés, trastornos del estado de ánimo,  problemas circulatorios, las infecciones respiratorias entre otras.

¿Cómo actúan los aceites esenciales?

En la aromaterapia se utilizan aceites esenciales, que son una mezcla de sustancias químicas extraídas de las plantas mediante destilación (flores, hojas, semillas, cortezas, frutos, hierbas, especias, etc.). Las propias plantas le dan su olor característico y sus propiedades. Son productos químicos intensamente aromáticos y que mezclan bien con aceites, estas pueden proporcionar beneficios psicológicos y físicos si se utilizan correctamente. 

La mezcla de estos aceites se puede usar en cualquier espacio, en el hogar, trabajo o cualquier lugar dónde quieres vivir la experiencia sensorial centrada en la mezcla de olores. 

La aromaterapia y sus aceites esenciales para el bienestar

Principales aceites para el uso de la aromaterapia

Albahaca: Es usado tradicionalmente para la depresión, los dolores de cabeza y para problemas respiratorios.

Menta: Relaja y calma los músculos del estómago y del tracto gastrointestinal trastornos, problemas respiratorios y tensión nerviosa.  Es eficaz para el tratamiento de los síntomas de la gripe.

Romero: Alivia los dolores musculares y reumáticas así como ayuda a la personas con presión arterial baja. Recientemente escáneres cerebrales han demostrado que la fragancia de romero aumenta la circulación sanguínea en el cerebro.

Tomillo: Es un aceite energizante físico, mental y emocional. Restaura el espíritu y llena la mente de energía y bienestar. Elimina el estrés.

Lavanda: Regula la hipertensión arterial, alivia los dolores de cabeza debidos a la tensión o al estrés y es especialmente sedante para las mujeres después del parto picaduras de insectos, quemaduras.

Limón: Reduce el cansancio mental, alivia el estrés, estimula la concentración y mejora la circulación.

La aromaterapia y sus aceites esenciales para el bienestar